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Cómo leer el mapa británico después del Brexit

No fue una petición popular. Cameron prometió celebrar un referendo si ganaba las elecciones parlamentarias de 2015. Respondió a las crecientes presiones dentro de su propio partido y al crecimiento electoral del partido nacionalista de derecha UKIP, que tomó como punto de honor la salida de la UE.

En el 2015, Cameron renegoció la posición de Reino Unido en la Comunidad, pero mantuvo en secreto cuál sería la posición que defendería en caso de cumplir con su promesa. Primero necesitaba el chantaje político para conseguir posiciones favorables a sus intereses. La paradoja: vendió la soga con la cual terminaron ahorcándolo y pasará a la historia como el Premier que sacó a Reino Unido de la Comunidad, a pesar de haber hecho campaña por su permanencia. Renunció inmediatamente después.

Quiénes con el Brexit

A favor del Brexit, se agrupó una diversidad importante de posiciones políticas e ideológicas. Desde un pueblo cansado del autoritarismo económico del más salvaje neoliberalismo que se desató tras la más reciente crisis financiera, defensores de la identidad nacional hasta movimientos xenófobos.

El Brexit dejó en evidencia que la izquierda europea es incapaz de hacer frente a una situación  en la que la soberanía popular fue anulada en función de los intereses económicos. El pueblo quedó a la deriva entre aprobar o no la permanencia dentro de un proyecto que es interpretado (y ¿sentido?) como una dictadura sometida a los caprichos del imperio alemán de Merkel: Sobre las inconformidades de la población con el proyecto europeo, cabalgaron movimientos de ultraderecha que son el verdadero peligro a lo interno del viejo continente.

Un nuevo ¿mapa?

Escocia dio un mensaje inequívoco de su voluntad de continuar dentro de la Unión Europea. Las 32 circunscripciones de Escocia votaron a favor de seguir siendo miembros de la UE: un 62% de los escoceses apostó por esta opción frente a un 38% que votó a favor del Brexit.

Nicola Sturgeon
Ministra Principal de Escocia

Nicola Sturgeon, líder de gobierno de Escocia ha llegado a proponer que se efectúe un referendo para definir si se despiden del Reino Unido. Sin embargo, las acciones han sido más cautelosas. Sturgeon ha presentado al Gobierno de Londres un plan para preservar el lugar de Escocia en la Unión Europea, que incluye la permanencia en el mercado único, lo que Theresa May, primera ministra de Gran Bretaña, se ha comprometido a estudiar, si bien ya ha anunciado que planea sacar al país del espacio económico europeo.

Escocia lidera todas las apuestas para convertirse en el nuevo centro financiero tras el Brexit. En su determinación para quedarse en el club europeo puede que logre arrebatarle el puesto a Londres.

Theresa May Primera Ministra Británica

La semana pasada May, defendió la unidad del Reino Unido con un ataque inusitado al partido gobernante en Escocia, el SNP, al que acusó de anteponer su objetivo de independencia a las necesidades de la población. En las altisonantes declaraciones llegó a acusar a Sturgeon de estar “obsesionada” con la independencia.

Una situación similar en Irlanda del Norte, zona en la que resultó triunfadora la permanencia en la Unión Europea favorecida con un 56% de los votos.

Ante este resultado, el viceprimer ministro de Irlanda del Norte, Martin McGuinness solicitó la celebración de un referéndum para que sus habitantes decidan si quieren salir del Reino Unido y unirse a Irlanda, ya que esto les permitiría seguir siendo miembros de la UE.

Irlanda recibió un “rescate” en el año 2010 de Europa. Tres años después había cancelado su deuda. En 2015, de hecho, la inversión de grandes empresas provocó que el PIB se disparara hasta el 26%. Los defensores de la Unión Europea lanzan mensajes alarmistas a la población: si salimos, nos vamos por el caño.

La provincia británica de Irlanda del Norte acudió a las urnas para renovar su asamblea regional por segunda vez en 10 meses, tras el estallido de un escándalo por corrupción que implicó la renuncia de altos funcionarios.

En ese ambiente tenso, el resultado del Brexit estuvo presente para caldear los ánimos rumbo a la legitimación de una Asamblea Legislativa que ya estaba en quirófano para una amputación de emergencia: se eligieron 90 parlamentarios, 18 menos que en el pasado, en una medida destinada a reducir costes en la más pobre de las cuatro naciones que componen Reino Unido.

Fue la elección más concurrida después de la de 1998, cuando se realizaron los primeros comicios tras los acuerdos de paz del Viernes Santo que puso fin a la violencia política intestina de Irlanda del Norte.

Veintiocho escaños fueron otorgados al Partido Unionista Democrático (partidarios de continuar de la mano del Reino Unido y salir de la UE), perdió 10 escaños en relación con las últimas elecciones, tendrán menos de 30 legisladores en la Asamblea de Stormont. La pérdida es significativa porque les anula el derecho de vetar iniciativas legislativas de manera autónoma, es decir: sin el apoyo de otros partidos.

La segunda organización más votada fue el Partido Nacionalista Católico Sinn Féin. Pasaron de 14 escaños a ocupar 27: casi un tercio del parlamento. Ellos proponen la separación del Reino Unido, y la reunificación de Irlanda.

a partir de ahora se inicia un periodo de tres semanas para que ambos partidos logren formar un nuevo Ejecutivo.

Michelle O’Neill

Para el presidente del partido, Gerry Adams, el resultado “es una reafirmación de nuestra posición sobre el brexit”. Otra nueva líder del partido Sinn Féin en Irlanda del Norte, Michelle O’Neill, alertó sobre la posibilidad de tempestades porque «el Brexit será catastrófico».

A partir de ahora se inicia un periodo de tres semanas para que ambos partidos logren formar un nuevo Ejecutivo.

El Brexit no es un divorcio orientado a romper con las políticas neoliberales. Tampoco se trata de una separación que mantenga a Reino Unido muy lejos de la influencia de la Unión Europea. Lo que se definió en el histórico referendo es un auténtico juego de tronos en el que las tendencias más ultraconservadoras y fascistas están sobre la colina divisando el horizonte.

LC

 

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