Un documento elaborado en secreto por el Gobierno Británico reflejaría los posibles efectos que traería consigo un Brexit duro, si este se ejecutara el próximo 31 de octubre. Entre las consecuencias más importantes se encuentra el desabastecimiento de medicinas y el aumento en los precios del combustible y los alimentos.
El informe, fechado el 2 de agosto y titulado operación Carpintero Dorado, asegura que si se ejecuta habrá graves atascos en los puertos británicos que impedirían el arribo al país de alimentos frescos y medicamentos.
Asimismo, señala que la situación provocaría protestas en todo Reino Unido que obligarían al uso de una cantidad importante de recursos policiales.
El Brexit duro también imposibilitaría el tránsito de 85 por ciento de los camiones británicos que recorren los controles aduaneros franceses. Este hecho provocaría una caída de «40% a 60% del nivel actual» de circulación de mercancías en un país que importa muchos de los alimentos que consume.
De acuerdo con el análisis hecho por expertos del Gobierno Británico, esta situación se podría prolongar hasta tres meses. Tom Brake, encargado del Brexit en el opositor Partido Liberal-Demócrata, afirmó que lo expuesto en la investigación sería sólo la punta del iceberg.
ARG