Unas 50 personas murieron en un sangriento atentado suicida este martes, en una mezquita de la ciudad de Mubi, una ciudad fronteriza con Camerún, al nordeste de Nigeria. El suceso se atribuye al grupo yihadista Boko Haram.
Durante la oración matutina en la mezquita, el kamikaze se mezcló entre los fieles y activó los explosivos dejando a decenas de muertos en el lugar y varios heridos.
Hasta los momentos, el atentado no ha sido asumido a ningún sector político o religioso, pero muchos aseguran que lleva la huella de Boko Haram, ya que es común que cometan estos ataques contra pueblos y atentados suicidas en la zona, sumando hasta la actualidad 20.000 muertos y 2,6 millones de desplazados en el nordeste de Nigeria como consecuencia de sus acciones violentas.
LS