La noche de este jueves 15 de marzo, la violencia y la persecución tuvieron un nuevo escenario en Madrid, específicamente en el barrio Lavapiés. El motivo fue la muerte del mantero senegalés Mame Mbaye, quien era perseguido por la policía local. Sin embargo existe una versión en que el senegalés en realidad recibía apoyo tanto de los cuerpos de seguridad, así como por parte de protección civil, luego de haber recibido un paro respiratorio.
Por su parte, la Asociación de Inmigrantes Senegaleses en España exigió transparencia en la investigación de este caso y que se apliquen las medidas de sanciones correspondientes a los culpables.
Momentos de tensión se vivieron en Lavapiés desde la muertes de Mbaye, cuando al menos 2 mil 500 personas salieron a las calles para pedir que se esclarecieran estos hechos.
Consignas como policía asesina no se hicieron esperar. El Sindicato de Manteros y Lateros al que pertenecía Mame Mbaye alentó a los manifestantes y recalcaron que estaban allí para combatir lo que calificaron como racismo institucional.
La comunidad africana en este país denunciaron que son víctimas de una “persecución policial”, por lo que advirtieron que realizarán una movilización el próximo martes 20 de marzo que partirá desde la plaza Nelsón Mandela de esa localidad.
GB