El fundador de la ONG española Open Arms, Óscar Camps, aseguró hoy en la isla italiana de Lampedusa que seguirá salvando vidas en el mar Mediterráneo hasta que la Unión Europea ofrezca vías seguras para los migrantes que huyen de sus países.
Además, pidió un puerto seguro para desembarcar a las 160 personas que están a bordo de su barco, entre ellos cuatro menores y tres mujeres embarazadas.
«Las organizaciones humanitarias que estamos en el mar resistiremos y ningún decreto, ni multa, ni código de conducta (en referencia al código de conducta que impuso el Gobierno italiano a las ONG en un intento de frenar su actividad), ni político evitará que protejamos las vidas humanas en el mar», dijo Camps.
El barco de Open Arms lleva ya nueve días en aguas internacionales, frente a Lampedusa, a la espera de que les permitan llevar a tierra a los migrantes socorridos en los últimos días en el mar, cuando navegaban en situación de dificultad.
Tres rescates en agosto
Han sido socorridos por la organización española en tres operaciones distintas, la primera fue el 1 de agosto, cuando auxilió a 55 personas; la segunda el 2 de agosto, a otras 69, aunque un día después fueron evacuadas tres mujeres por motivos de salud; y la última, esta madrugada, cuando salvó a otras 39 personas.
Camps cargó contra los gobiernos europeos que no ofrecen una solución y lamentó que «muchos políticos, si pudieran, cambiarían el Derecho Marítimo, el Derecho Internacional, en su beneficio político y económico».
Un reconocido actor sumó su apoyo
En la rueda de prensa celebrada en Lampedusa también participó el actor estadounidense Richard Gere, quien el viernes se acercó «de forma espontánea» hasta el barco para llevar provisiones y mostrar su apoyo, al tiempo que criticó la ley antiinmigración del ministro del Interior italiano, el ultraderechista Matteo Salvini, que impone multas a las ONG que salvan vidas en el mar.
FF