Igor Konashenkov, portavoz del Ministerio de Defensa ruso, aseguró que la principal piedra de traba en la lucha de ese país contra el terrorismo, es la interacción de la inteligencia de Estados Unidos con grupos como el Estado Islámico (Daesh en árabe), lo que obstaculizan las operaciones en contra de dichas organizaciones criminales.
Se presume que varios ataques hechos a la nación siria fueron realizados desde localidades que están bajo el control del ejército norteamericano, que en alianza con los kurdos permitiría los ataques a la nación árabe, ya que «los avances del ejército sirio contradicen los objetivos e intereses de Washington en Siria», afirmó el representante ruso.
Asimismo, asegura que los hechos del pasado 28 de septiembre en los que 300 integrantes de Daesh se trasladaron a la ciudad de Al-Qaryatein, evadiendo varios puestos secretos de inteligencia, no pudo haber sido por «cuestión de suerte» y debieron contar con alguna clase de apoyo aéreo.
Esto destaparía una ola de rumores acerca de la sinceridad de la nación norteamericana ante el mundo y de su vinculación con grupos terroristas, cosa que no sería nueva, luego de que el portal web Wikileaks revelara documentos de la ex candadidata democráta Hillary Clinton en los que advertía de un surtimiento de armas al Estado Islámico.
Varios analistas coinciden en que la supuesta lucha contra el Estado Islámico es sólo una estrategia de EE.UU para concretar el objetivo de «dividir y vencer», maquillado tras los múltiples bombardeos de la llamada coalición internacional que ha dejado un gran saldo de civiles heridos y muertos, que son, los verdaderos afectados en la situación bélica del Medio Oriente.
kH