El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, informó que, a pesar del pacto de paz logrado el pasado 27 de abril entre las dos coreas, las tropas estadounidenses que se encuentran desplegadas en territorio coreano no se retirarán.
Moon explicó que la presencia de los soldados tiene que ver con un convenio entre Washington y Seúl y no tiene vinculación con el tratado de paz. Sin embargo, entre los acuerdos de paz establecidos entre ambos mandatarios asiáticos se fijó la posible desnuclearización de la Península y el cese de las hostilidades.
Los comentarios del surcoreano se producen después que comenzara a circular en el ambiente político de Corea del Sur expresiones sobre lo injustificable que sería mantener a los militares de Estados Unidos en el país si se llega a pactar la paz definitiva con el norte.
Desde el palacio de gobierno en Seúl, han destacado también el papel mediador que desempeñan las tropas estadounidenses desplegadas en Corea ante otras potencias regionales como China y Japón, además resaltaron la necesidad de mantener dicha presencia.
Aunque la retirada de tropas estadounidenses de la península es una reclamación habitual del líder norcoreano, Kim Jong-un, no mencionó este tema durante el encuentro que mantuvo con Moon en la frontera intercoreana. Tampoco se mencionó el ejercicio militar conjunto entre Seúl y Washington “Max Thunder”, que se llevará a cabo el próximo 11 de mayo y durará dos semanas.
Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos (EEUU) condiciona la discusión de la disminución de sus soldados de la península a la desnuclearización de Corea del norte. Entretanto, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, aseguró que para ello realizarán negociaciones con aliados y con Corea del Norte.
Hasta el momento, se estima que unos 28.500 militares estadounidenses se mantienen en Corea del Sur.
MT