Caminaban por la calle muy tranquilos, mientras conducían un coche de bebé, pero lo que allí transportaban estaba muy lejos de ser tierno. El ahora bautizado como «monstruo de Ecatepec» (ciudad ubicada en México) y su pareja, llevaban dentro de ese pequeño medio de transporte varias partes de cuerpos humanos relacionadas con al menos 10 asesinatos.
En el interrogatorio, el hombre que responde al nombre de Juan Carlos, declaró haber asesinado al menos a 20 mujeres y no mostró ningún signo de arrepentimiento. Pero quizás lo más escalofriante no fue la masacre de cuerpos sino lo que hacía con ellos, y es que el «monstruo de Ecatepec» vendía al mejor postor esas partes de los cadáveres de sus víctimas.

De acuerdo con los investigadores, se encontraron al menos cuatro bolsas de plástico con restos humanos en un terreno baldío, en el apartamento de la pareja y en otra propiedad cercana. Los asesinos guardaban las partes humanas en cubos llenos de cemento y en una nevera.
Una de las mujeres asesinadas se encontraba desaparecida recientemente junto a su bebé de dos meses, que según las investigaciones fue vendida por los homicidas. En el curso de las pesquisas hechas por los cuerpos de seguridad la menor de edad fue encontrada y ahora se encuentra a salvo a cargo de su abuela materna. Este caso, que es bastante común en el país norteamericano, ocasionó fuertes protestas en la ciudad de Ecatepec.
ARG