Tras la consolidación de las fuerzas militares de Bashar Al Asad y el control en casi dos tercios del territorio, el gobierno de Siria se ha apoyado en sus aliados en la guerra contra las fuerzas rebeldes del Estado Islámico (EI) para reconstruir el país.
Empresas de China, India, Malasia, Brasil y Sudáfrica «han expresado el deseo de participar en el programa de reconstrucción de Siria«, según anunció el ministro de Exteriores del país árabe, Walid Muallem.
No obstante, la reconstrucción de la nación árabe también cuenta con el apoyo de los presidentes de Irán, Rusia y Turquía, Hassan Rouhani, Vladímir Putin y Recep Tayyip Erdogan que en días recientes subrayaron un compromiso con la soberanía, independencia, unidad e integridad territorial de Siria.
Una de las prioridades del gobierno sirio es restablecer las vías férreas en el país. El ministro de Transportes, Ali Hamud, indicó que «los ferrocarriles desempeñarán un papel fundamental durante la fase de reconstrucción” pues pueden transportar cargas de gran volumen «de manera rápida y a menor costo«.
De los 2.450 km de vías que atravesaban Siria y que los rebeldes hicieron explotar para obstaculizar el tráfico, o desmantelaron los raíles para revender el metal, las autoridades aspiran a rehabilitar 1.800 en una primera etapa.
NP
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