La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, está haciendo un esfuerzo titánico por limpiar su nombre de los nuevos rastros de corrupción que sus detractores han querido develar durante las últimas semanas.
En esta oportunidad la polémica surge por la presunta falsificación de un documento público, como es el acta que acredita la presentación del Trabajo de Fin de Máster.
El tribunal que evaluó el trabajo de fin de máster (TFM) de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, nunca se reunió, y las tres profesoras que figuran como integrantes del mismo nunca han formado parte de un órgano de este tipo, según publica hoy el diario digital El Confidencial.
Cifuentes se ha defendido, diciendo que “se ha querido vender como una cosa excepcional [que no fuera a clase y se matriculara tres meses después]. El tratamiento que se me dio a mí es algo que se hace con cierta frecuencia a aquellos alumnos de postgrado que están trabajando”.
ElDiario.es asegura que la verdad es que Cifuentes no fue vista nunca en el aula por sus compañeros, tampoco fue a exámenes y se matriculó un trimestre más tarde de que empezaran las clases, tal y como afirmó eldiario.es y ayer la presidenta admitió.
Recientemente, lo que se ha denominado el “caso máster” fue trasladado a la Fiscalía para determinar si se cometió algún delito.
De acuerdo a las leyes españolas, la falsificación de un documento público está tipificada en el artículo 390 del Código Penal con penas de tres a seis años de prisión, multa de seis a veinticuatro meses e inhabilitación especial por tiempo de dos a seis años si quien lo comete es un funcionario o una autoridad en el ejercicio de sus funciones.
¿Le costará el polémico máster la presidencia de la Comunidad de Madrid? Aunque es difícil dar con la respuesta, lo que cabe preguntarse es ¿a qué fuerzas políticas conviene esta nueva mancha en quien ha representado una de las fichas más cercanas a Rajoy?
KP