Decía el apóstol Pedro en la biblia «el que quiera amar la vida y gozar de días felices, que refrene su lengua de hablar el mal y sus labios de proferir engaños, que se aparte del mal y haga el bien, que busque la paz y la siga» 1 Pedro 3:10
En Venezuela, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) lejos de seguir el camino de la paz, se convirtió desde la llegada del presidente Hugo Chávez al poder, en un brazo más de la oposición venezolana, encontrando en la derecha del país un canal para impartir su sesgado sermón hacia el pueblo venezolano.
Es así como en el transcurso de estos últimos 19 años, varios miembros de la iglesia católica han participado de manera pública en golpes de estado, acciones anticonstitucionales, y lo que es peor, aupando desde las sagradas misas de los domingos, el alzamiento de los feligreses contra el gobierno legítimo, primero de Chávez, y posteriormente el de Nicolás Maduro.
VT trae para ustedes un histórico de las acciones más emblemáticas que desde la CEV se han ejecutado para dar al traste con el proceso de transformación social y político en Venezuela.
2002: Golpe de estado contra Hugo Chávez
Durante este año la jerarquía de la Iglesia Católica en Venezuela asumió parte del protagonismo político, de algún modo para suplir el vacío de los partidos desvencijados y sin capacidad de influencia. De manera frontal y agresiva sus principales dirigentes, entre ellos el cardenal Ignacio Velasco, y el entonces presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, Baltazar Porras, se sumaron a casi todas las campañas contra el gobierno generando sus propias matrices de opinión.
Junto con los medios de comunicación social, a partir del segundo semestre de 2001 estos jerarcas católicos comenzaron a conspirar para derrocar al presidente Chávez por la vía de un golpe de Estado. El 11 de abril del 2002, pudo observarse a través de las cámaras de televisión nacional, la presencia de varios representantes de la iglesia católica en Miraflores en el acto de juramentación del presidente de facto Pedro Carmona Estanga.
Monseñor Ignacio Cardenal Velasco (+), fue uno de los firmantes del decreto del empresario Carmona Estanga y estuvo presente en reuniones de oposición para sacar al Presidente democráticamente electo del poder. El 12 de Abril, imágenes de televisión mostraron a Velasco en el Palacio de Miraflores, momentos antes de asistir a la auto proclamación del dictador Carmona. Velasco falleció afirmando que solo “firmó un papel en blanco” y que no sabía lo que estaba firmando.
Luis Ugalde s.j, entonces rector de la Universidad Católica Andrés Bello participó de manera activa en el golpe de estado perpetrado contra Chávez. Una nota informativa de la agencia BBC Mundo, fechada el 06 de marzo 2002 y titulada “Venezuela: plan post-Chávez”, reseña la destacada participación e influencia de Luis Ugalde en los preparativos del golpe del 11 de abril 2002:
«La oposición empresarial y sindical de Venezuela, con el aval de la Iglesia Católica, presentó este martes [05-03-2002] las bases de un plan de gobierno de transición, a ejecutarse tras lo que consideran inminente salida del poder del presidente del país, Hugo Chávez.(…) El sacerdote Luis Ugalde, rector de la Universidad Católica, fue el encargado de expresar ‘la felicidad’ de la cúpula de la Iglesia Católica por el documento, denominado ‘Bases para un Acuerdo Democrático’, al que se estima que se sumarán los partidos políticos y otros sectores de la oposición».
El ex rector de la UCAB, quien actualmente ejerce altos cargos directivos en la organización mundial de los jesuitas, afirmó en un foro de la Fundación Espacio Abierto que «sin apoyo militar» no se puede «salir de esta dictadura», y que por tanto es necesario respaldar un levantamiento militar con participación incluso de sectores del «chavismo» para instalar ese gobierno de supuesta unidad nacional que llamaría a elecciones generales y regionales en el plazo de un año. Ugalde, quien le dio rostro al golpe de estado contra el presidente Hugo Chávez en el 2002, nuevamente propone un «gobierno de transición» y aúpa una salida militar contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Otro de los clérigos de la CEV es el Cardenal Jorge Urosa Savino, quien desde el año 1998, inició su arremetida contra el presidente con declaraciones ofensivas, que sólo se detuvieron el 2005, cuando estaba en manos del mandatario nacional su nombramiento como arzobispo de Caracas.
En pleno golpe de Estado, el prelado expresó satisfacción por el derrocamiento del gobierno que calificó como una «verdadera pesadilla para Venezuela”, según reseñó el diario Notitarde el 13 de abril de 2002. Asimismo, el entonces arzobispo de Valencia, estado Carabobo, acusó al gobierno de Chávez de ser responsable de las muertes ocurridas en el centro de Caracas durante el golpe. Años después se corroboró que dicha insurrección fue planificada por empresarios, militares y sectores de derecha del país, cuya agenda incluyó el asesinato de personas en las calles.
Solidaridad con delincuentes de las Guarimbas 2014
El mundo entero fue testigo de las acciones terroristas de calle perpetradas por grupos violentos de la oposición venezolana, dirigidos por el vocero del partido opositor Voluntad Popular Leopoldo López que terminaron con el asesinato de 43 venezolanos, destrucción de bienes públicos, persecución política y violación de los derechos humanos.
Durante la Misa de Ramos, celebrada el 15 de marzo del 2015 en la Catedral de Caracas, el arzobispo Jorge Urosa Savino, abogó por las personas que permanecían detenidas a raíz de las guarimbas de 2014 y aseguró las personas que se encontraban detenidas por los delitos consagrados en la Constitución y las leyes venezolanas, debían «estar libres o al menos ser juzgados en libertad”. Urosa obvió delante de toda la feligresía presente que la mayoría de los detenidos, no sólo fueron entrenados por paramilitares y financiados por la oposición venezolana, sino que además acabaron con la vida de personas inocentes.
Ayer contra Chávez, hoy contra Nicolás Maduro
El pasado 16 de enero del 2015, en una homilía de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) que encabeza Monseñor Diego Padrón arremetió contra el gobierno de Nicolás Maduro. En la llamada «Exhortación pastoral: renovación ética y espiritual ante la crisis» Monseñor Padrón aseveró que «el mayor problema y causa de la crisis en Venezuela es la decisión del Gobierno de imponer un sistema político-económico de corte socialista, marxista o comunista, que es totalitario y conduce a la opresión y a la ruina».
En esta misma línea discursiva y de acuerdo a una nota publicada por el periódico ABC de España, el pasado 02 de enero del 2017, el Arzobispado de Caracas a cargo de Jorge Urosa Savino, durante su «Mensaje de Año Nuevo y Jornada Mundial para la Paz 2017», exhortó a todos los sacerdotes a leer en las misas de año nuevo un panfleto instando a la feligresía católica a que se «rebelen de forma pacífica y democrática contra la dictadura chavista» y a “no dejarse intimidar”. Esta postura contrasta con las declaraciones que en los últimos meses ha dado el Papa Francisco, quien lejos de condenar al gobierno venezolano como dictatorial, ha apostado pro el diálogo y la paz en el país.
AMR