Contrariamente a la mala reputación que han tenido los gatos por años, en la actualidad se han convertido en los animales de compañía por excelencia para las familias modernas debido a que no requieren tantos cuidados y dedicación de tiempo como, por ejemplo, los perros. Además, tener un gato en casa como animal de compañía tiene muchos beneficios para la salud física y mental de los humanos. Si aún no te has decidido a adoptar uno, aquí te damos 9 buenas razones que convertirán a los gatos en tus predilectos.
- 1. Consumen poco alimento y son ecológicos
En comparación con otros animales de compañía como los perros, los felinos consumen una dieta generalmente menor, por lo que alimentarlos es más económico. Además, de acuerdo a estudios realizados en 2009 para calcular la huella ecológica de los animales de compañía, la cantidad de carbono emitida para producir alimentos para gatos es considerablemente menor a la de otros animales porque se utilizan más pescados en vez de maíz y carnes rojas en su elaboración, por eso nuestros peludos felinos son considerados más ecológicos.
2. No requieren salir de casa para desahogar
Los gatos son muy estrictos a la hora de usar de su baño. Una caja de arena que se cambie y limpie regularmente bastará para que no tengamos preocupaciones. Ellos son muy metódicos y se toman el tiempo para esconder sus heces y así evitar que desprendan olores. Teniendo un baño privado no hay problemas con llegar tarde a casa pues no estarán esperándonos junto a la puerta para que los saquemos a desahogar.

3. Demandan poco tiempo
Aunque todos los animales de compañía exigen un tiempo para compartir con su familia, la demanda de tiempo de los gatos es generalmente baja pues no requieren de largos entrenamientos de obediencia ni tampoco de horas de juegos en el parque para socializar con otros animales. Un gato suele ser bastante independiente y su entrenamiento básicamente será para aprender a ir a su caja de arena, no jugar con las cortinas o no comerse la comida de otro. Normalmente juegan ellos solos casi con cualquier cosa. Una buena manera de distraerlos es construyéndoles un parque para gatos con algunos materiales de reciclaje como tiras de tela, palitos, plumas y cordones, dejando un espacio hecho de cartón grueso corrugado o cordón entorchado donde puedan rasgar. De seguro pasará horas divirtiéndose.

- 4. Ayudan a mantener a los bichos a raya
Los gatos son cazadores natos y cualquier cosa que se mueva le llamará la atención. Es un alivio tener un gato en casa cuando algún ratón o cucaracha intentan instalarse en nuestra cocina, pues por lo general no descansarán hasta acabar con ellos o hacer que se vayan.
- 5. Fortalecen el sistema inmunológico de los bebés
Poner en contacto frecuente a los niños pequeños con gatos ayuda a crear anticuerpos y fortalecer su sistema inmunológico previniendo el desarrollo de alergias. Los felinos también ayudan a prevenir algunas afecciones respiratorias como el asma. En general, un gato que tienen sus vacunas al día no representa peligro alguno con respecto a la transmisión de enfermedades, lo que desmonta el mito de que las mujeres embarazadas deben deshacerse de ellos.

- 6. Son autolimpiables
Aunque muchas personas bañan con regularidad sus gatos, lo cierto es que ellos suelen mantenerse limpios debido a que se acicalan prácticamente todo el día. A los felinos les gusta estar limpios y secos por lo que casi nunca desarrollan malos olores, por ello probablemente nunca tendrás que llevarlo de emergencia a la peluquería.

- 7. Ayudan a aliviar el estrés
Contar con la compañía diaria de un gato ayuda a los adultos a aliviarse del estrés. Los gatos son sumamente cariñosos y empáticos con los humanos y las relaciones de afecto a través de las caricias permite a las personas a relajarse, mejorar la presión arterial y bajar los niveles de ansiedad.
- 8. Cuidan tu corazón, huesos y músculos
¿Sabías que las personas que cuidan gatos tienen un 30 % menos de probabilidades de morir de ataques cardíacos? Pues así lo afirman investigadores del Instituto Stroke de la Universidad de Minnesota, quienes estudiaron a unas 4500 personas de las cuales 3 de cada 4 participantes tenían gatos. Luego de 10 años determinaron que quienes convivían con felinos experimentaban una reducción del riesgo de morir por ataques al corazón del 30 por ciento comparados al resto de la muestra.
Por si eso fuera poco, estudios realizados por Scientific American confirman el poder que tiene el ronroneo de los gatos. En un artículo sobre por qué los gatos emiten esa vocalización particular cuando están felices, explican que la frecuencia del ronroneo (que se encuentra entre los 25 y 150 Hertz) puede mejorar la densidad ósea y promover la cicatrización. Entonces, el ronroneo de nuestros gatos es en definitiva terapéutico.

- 9. Ayudan a desarrollar sensibilidad, empatía y responsabilidad
Cuando hay niños en la familia nada mejor que permitir que compartan con otros seres vivos. Los animales de compañía ayudan a los niños a desarrollar habilidades sociales y a sentir empatía por el otro. Además, son una buena razón para irles enseñando el sentido de la responsabilidad delegándoles, por ejemplo, colocarles la comida y enseñándoles a respetarlos y cuidarlos.
T/MP
Con información de Protección Animal Mundial