El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, ha descartado la posibilidad de renunciar a su cargo, luego de que movimientos políticos de la izquierda peruana propusieran su salida del gobierno luego de haber indultado al exmandatario Alberto Fujimori, condenado por delitos de lesa humanidad.
«No es una cuestión personal, es una cuestión institucional, me eligieron por cinco años y los completaré», dijo el representante de la derecha peruana, quien a su vez aseguró que la única manera de que salga del cargo antes del plazo establecido es que muera. «Y no me pienso morir«, añadió.
Izquierda Unida y Alianza Perú, organizaciones políticas de izquierda, anunciaron previamente que solicitarían ante el Congreso un nuevo proceso de destitución del jefe de Estado, que ya estuvo sometido a un procedimiento similar en diciembre del año pasado por sus vínculos corruptos con la constructora brasileña Odebrecht.
Tal como ocurriera entonces, las probabilidades de que tenga efecto la moción en el Congreso son muy bajas: el fujimorismo, con mayoría en la Cámara, vio con buenos ojos la decisión de Kuczynski, mientras que los convocantes del proceso son minoritarios en el seno del Congreso.
Apelando a la Constitución y su claridad con respecto al mandato que le toca ejercer, el actual presidente peruano ha negado entonces una posible salida del gobierno. Esta, por ejemplo en 2016, era la «solución» que planteaba para Venezuela, cuando abogaba por «una transición ordenada» de unos meses o incluso hasta 2019, que sirviera para borrar del mapa al chavismo.
JI