Algunos médicos estadounidenses que tienen condenas previas por varios delitos, son los que se encargan de examinar a los inmigrantes que entran en ese país y buscan la residencia permanente, según un estudio realizado por el Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU.
Los delitos que forman parte del perfil de los galenos, van desde condenas por intentar contratar un asesino a sueldo para matar a un paciente insatisfecho, antecedentes por haber abusado sexualmente a sus pacientes, hasta una doctora sancionada por permitir que su personal diluyera vacunas.
De los más de 5.500 médicos de todo el país que fueron investigados y reclutados desde junio de 2017 para examinar a los solicitantes de residencia permanente, 130 tienen antecedentes delictivos.
El documento que dio a conocer la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional, precisa que la falta de eficacia al momento de investigar a los médicos pone “en riesgo de abuso” a los inmigrantes.
En este sentido, Alma Rosa Nieto, vicepresidenta del comité de medios de la Asociación de Abogados de Inmigración Americana, señaló que los hallazgos del informe eran “muy inquietantes y aterradores”, sobre todo porque las personas que se someten a los exámenes son vulnerables. “Son personas que están muy necesitadas, están desesperadas por obtener su residencia permanente”.
NP