El Estado de Israel mantendrá el suministro médico a los grupos armados que combaten contra el gobierno de Bashar al-Asad. Así lo confirmó el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Estas declaraciones las emitió poco antes de iniciar una reunión con su gabinete en la capital, Tel Aviv, donde atribuyó el apoyo de su administración a los grupos terroritas a “esfuerzos humanitarios”, reseñó este domingo HispanTV.
El gobierno de Netanyahu ha apoyado no sólo con medicinas y atención sanitaria, sino con alimentos y logística a los “rebeldes” desde el comienzo del conflicto, y en este tiempo han atendido en centros hospitalarios de Israel a miles de terroristas heridos.
El anuncio de Netanyahu llega en el momento de mayor tensión en lo que va de conflicto armado, tras el ataque estadounidense con el lanzamiento de 59 misiles a una base del ejército sirio en la región de Homs, que ha generado el repudio del mundo, y en particular de Rusia.
Escudado en la supuesta responsabilidad del gobierno sirio en el ataque con armamento químico efectuado un día antes en Idlib, el ejército estadounidense realizó esta acción, ante lo cual el premier israelí se deshizo en elogios para Estados Unidos (EE.UU.).
Aunque las investigaciones aún no han arrojado quiénes utilizaron las armas químicas en Idlib, Netanyahu exhortó a la comunidad internacional al desarme de la nación árabe de armas químicas. Mientras tanto, reitera su apoyo a los grupos terroristas y a EE.UU.
El representante de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, advirtió al secretario de Estado de EE.UU, Rex Tillerson, lo inapropiado de acusar a las Fuerzas Armadas de Siria por el ataque químico, cuando “se señaló la necesidad de realizar una investigación de forma exhaustiva, imparcial y profesional para clarificar los hechos”.
