La actriz estadounidense Meghan Markle, se convirtió en madre este jueves, dando a luz un miembro más de la realeza británica, un nuevo heredero para la corona inglesa.
Sin revelar muchos detalles, ni nombres; la casa Windsor, hacen ver las costuras de una realeza que desprecia a sus plebeyos, así sea su propia sangre, como ha pasado con este nuevo «heredro», siendo el único miembro «mestizo» de la realeza británica por nacimiento.
La ex actriz estadounidense, ahora duquesa de Sussex, es hija de la maquilladora Doria Ragland, de origen afroamericano y descendiente de esclavos; lo que hace un hito en una de las realezas más herméticas del mundo.
Muestra de ello es la notable diferencia con su cuñada, la duquesa de Cambridge, con quien no tiene ninguna relación, más allá de la que los compromisos reales les exigen.
Se supo que el día de la boda entre Harry y Meghan, Kate Middleton hizo llorar a la novia por comentarios y acciones fuera de lugar, aunque luego de la ola de rumores, la «realeza» tapó como pudo el incidente.
El nuevo miembro es el séptimo en la línea sucesorial al trono de Reino Unido, detrás del Príncipe de Gales (Carlos), el Duque de Cambridge (William) y sus hijos -el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Luis- y el Duque de Sussex.
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