El Grupo Internacional de Contacto sobre Venezuela acordó en Montevideo enviar una misión técnica al país caribeño para seguir trabajando, así como volver a reunirse en marzo.
Aunque no lograron una decisión unánime, ya que una parte llamó a elecciones presidenciales, otra se abstuvo de firmar el acuerdo final ya que acusan de que la Unión Europea de echar a perder la tentativa original en Montevideo, que era llegar a una solución sin usar la injerencia
Países como Bolivia, México, Uruguay, así como los miembros del Caricom se niegan a pedir elecciones puesto que reconocen al gobierno de Maduro y están a favor de la supremacía de los pueblos.
Por lo tanto quieren un proceso que permita llegar a una «solución venezolana» de su propio conflicto y que así se evite un escenario aún más crítico.
Luego de más de cinco horas de deliberaciones a puertas cerradas, los ministros de Exteriores, así como otros representantes diplomáticos de diferentes países europeos y latinoamericanos reconocieron «severidad de la crisis actual en Venezuela y de su impacto en la región».
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