En medio de una de las mayores crisis del sistema penitenciario de la historia de Brasil, que mantiene en jaque al Gobierno y a las administraciones estatales, el Ejecutivo de Michel Temer anunció este lunes que las fuerzas armadas podrán realizar inspecciones rutinarias en las cárceles, reseñó EFE.
La crisis penitenciaria ha alcanzado «dimensiones nacionales» y requiere de «acciones extraordinarias», admitió el presidente Temer tras participar en una reunión con órganos de seguridad e inteligencia estatales.

